Cómo empezar tu bodega de vinos particular

¿Existe un proyecto más ilusionante para un auténtico amante del vino que la construcción de su propia bodega en casa? En Colonias de Galeón creemos que no. Con los años, el clásico ten un hijo, planta un árbol y escribe un libro se han ido transformando en objetivos vitales mucho más profundos, dignos del hombre moderno: educa, valora y protege la tierra y cuenta grandes historias. Sin duda unos objetivos mucho más centrados en el ser que en el tener y, lo más importante, objetivos fácilmente resolubles durante la creación de nuestra bodega.

Educar, porque de una bodega aprenderemos nosotros y aquellos que nos rodean, dando valor a una tradición y pilar de nuestra cultura de siglos de antigüedad, valor y amor por la tierra a través de una apuesta por la producción más sostenible y respetuosa con el entorno que la ve nacer y, finalmente, respecto a las grandes historias… Bueno, quizás lo mejor que descubras ese placer por ti mismo.

En cualquier caso, la idea de contar en casa con una buena selección de referencias que disfrutar con tus invitados y, por supuesto, también con las que sorprender en las ocasiones más ilustres te colocará en un lugar destacado como anfitrión y brindará a tu hogar un toque de distinción incomparable. Antes de ponerte a ello, desde nuestra bodega deseamos compartirte algunos consejos que sin duda te resultarán útiles en tan ambicioso proyecto:

 

  1. Nuestras preferencias y las de nuestros allegados, el primer criterio de selección. Aunque lo ideal es que nuestra bodega goce de cierta variedad en cuanto a sus referencias, el criterio principal a la hora de decidir los estilos de vinos que protagonizaran nuestra colección particular es nuestras propias referencias, así como, en todo caso, las preferencias de aquellos familiares y amigos con los que más frecuentemente compartamos momentos frente a una copa de vino. Una bodega particular, por muy bien que luzca, debe estar pensada para disfrutarse y para eso nada como dejarnos guiar por paladar, rara vez criterio equivoco.

 

  1. La practicidad, algo a tener muy en cuenta. Antes de lanzarnos a la compra compulsiva de cientos de referencias debemos controlar el espacio disponible para dedicar a nuestra bodega. Esto nos dará algunas orientaciones acerca del número de botellas que podremos almacenar. Cuestiones como el tamaño, la forma de la botella y las necesidades de conservación, que no son las mismas para todos los vinos, también resultarán dignas de estudio e importantes limitaciones. Por otra parte, cuanto mayor diversidad de vinos en lo referente a la conservación, tamaño y forma deseemos abarcar, mayor será la inversión que habremos de plantear para asegurar esa versatilidad. Una frecuencia de consumo alta nos permitirá poder efectuar compras regulares de nuevos vinos, mientras que una frecuencia de consumo más baja nos pedirá mayor sosiego en la compra para no incurrir en problemas de falta de espacio.

 

  1. En el equilibrio está la virtud. Si algo debe tener una bodega, ya sea particular o no, es orden. Agrupar los vinos por tipos y con cierta segmentación ayudará a facilitar el proceso de búsqueda en el momento de consumo, pero también a mantener un control más riguroso acerca de los vinos que integran nuestra colección. Además, algunos vinos están pensados para su consumo durante ese mismo año, mientras que otros son más pacientes, coloca los primeros en un lugar visible y cercano, de este modo evitarás que caigan en el olvido, perdiendo así todas sus propiedades. Por otra parte, y siempre teniendo muy en cuenta nuestras preferencias como ya hemos señalado, es recomendable lograr un equilibrio aceptable entre referencias pensadas para cada uno de nuestros momentos de consumo de vino. Por ejemplo, vinos para maridar con las distintas tipologías de nuestros grandes menús, vinos para tomar solos, vinos para las ocasiones especiales, vinos para sorprender a nuestras amistades, etc. Finalmente, deberemos encontrar también un equilibrio entre la compra de nuestros grandes favoritos y la apuesta por referencias nuevas, que nos puedan descubrir nuevos matices. Solo así lograremos seguir creciendo en este fascinante mundo y, por supuesto, enriqueciendo nuestra bodega.

 

Y para la ampliación de nuestra bodega casera con los sabores de nuestra provincia, nada como dejarse enamorar por nuestras seis referencias, producidas íntegramente en Cazalla de la Sierra y ya disponibles para el envío a domicilio a través de nuestra tienda online.